Imagen: Pablo Nougé.
Balada triste para una madre ausente
El corazón de los hombres
tiene huecos y perdones
el tuyo, madre,
grietas y ventanas donde la dignidad
aparece envuelta en llanto.
El desierto carece de sentido
y en el mar
el grito mudo de tu ausencia
pesa y duele
como un verano
sin sol
como una tristeza sin pena.
Elegía de un hombre solo
Llevas en ti un teatro
un trapecista
una cajita de música
y una carpa de circo
Aceite de jengibre
esencia de bosquejos
anaqueles de otra historia
un réquiem
y dos poemas.
Llevas en ti una depresión
una ira
dos sonetos
una guitarra
y un diccionario de llantos.
Con eso caminas
haciendo de las calles
una elegía fingida
sufriendo de hambre vieja
frío de tres inviernos
y las fiebres de un noviembre.
Pobre de ti hombre solo
la intransigencia de la humanidad
convirtió tu futuro
en un holocausto.
Remedios para un mundo
Urge pisotear la vanidad que nos envuelve
ampliar la mirada de los impíos
saltar muros de incomprensión y romper ventanas de incorporeidad
huir de lo global y habitar en lo parcial
exterminar a los que por su boca nos arrastran a los exilios
borrar los exterminios, también
hablar con los hijos y explicarles que los arboles se mueven
detenerse ante el mar y caminar por las orillas de los ríos
buscar al otro para llenarle de abrazos de equidad
recuperar al nosotros, también
borrar de los mapas al que no sonríe y apalea
recuperar las sabanas blancas y los paseos al alba
trazar rumbos de sanidad con las palabras
restar hambruna moral y sumar conocimiento latente
embelesarse de la lluvia y cegar a la catástrofe
atemperar la razón y depositar en los desiertos la inconsciencia de los soberbios
recobrar significado y hacer ley de lo sentido
verter de caminos la esperanza de los hombres
ser valientes y afrontar la diversidad como rumbo
escuchar la música que alberga nuestros órganos
hacerse de trincheras de globos para recuperar la ilusión del vosotros
Si con esto no sirve
tendremos que saltar a otro mundo
o mudarnos al otro barrio
Plegaria
No le digas a mi padre
que por las noches
sigo teniendo miedo al timbre de la puerta.
No le digas a mi padre
que desde hace tres meses y veinte días
no sonrío.
No le digas a mi padre
que la oscuridad se ha hecho mañana
y el día hostilidad.
No le digas a mi padre
que en el amanecer de los domingos
soy incapaz de escuchar a los Beatles
No le digas a mi padre
que lloro
cuando oigo el sonido de sus gestos.
No le digas a mi padre
que está siendo complicado acostumbrarme
a vivir en su madrugada.
No le digas a mi padre
que el mundo anda repleto de miedo
y que yo
muero de el.
No le digas a mi padre
que los que quedaban
se fueron lentamente.
No le digas a mi padre
que no me acostumbro a pasear
por las calles en las que aprendí a vivir de su mano.
No le digas a mi padre
que no me atrevo a observar las imágenes de la infancia
en las que nuestros rostros desprendían
la esperanza del mundo.
No le digas a mi padre
que vivo refugiada
en la biografía del silencio.
Montse Ordóñez (1974, Barcelona) Gestora cultural. Creadora del proyecto cultural Cuban Rapshody, donde se aglutinan varias disciplinas artísticas y literarias de la cultura cubana. En 2013 colabora junto al fotógrafo David Pujadó en la edición de la exposición “Fotografiant Gil de Biedma” que se realiza en la Biblioteca de Terrasa, Barcelona, que posteriormente se expone en el Instituto Cervantes de Belgrado. Colabora en la edición y prólogo del libro de Ariel B. Acosta La balada de los suicidas, publicado en USA por Eriginal Books. En 2014, colabora en la edición y prólogo del libro del poeta cubano Delfín Prats El esplendor de las palabras, publicado en España por Ediciones Cumbres. En 2015, presenta dos lineas editoriales en el CCE de Miami, USA. En 2016, imparte un taller de poesía y narrativa en Barcelona e impulsa el proyecto de la Libroterapia.
Colaboradora habitual de Ediciones Cumbres y Editorial Huso, España. Miembro del consejo editorial de la Revista Verbo(des)nudo, Chile. Ha sido miembro del jurado del II Premio de Poesía Editorial Verbo(des)nudo, Chile. Sus trabajos han sido publicados en Revistas literarias de USA, Chile, España, Colombia, Uruguay, Argentina y México. Su trabajo en edición de imagen y poesía ha sido presentado en una exposición dedicada a Gil de Biedma en el Instituto Cervantes de Budapest.
En la actualidad, está involucrada en varios proyectos culturales en la ciudad de Barcelona. A finales de año publicará su poemario La orilla de los nadie.